El CPAP es una máquina que administra aire a presión de manera continua a través de la vía respiratoria superior (nariz y garganta) para mantenerla abierta y prevenir las obstrucción del flujo de aire. Este equipo se conecta a la corriente eléctrica y toma el aire que existe en el medio ambiente arrojándolo a presión a través de un circuito y una mascarilla a través de las vías respiratorias del paciente. Este aire a presión impide el cierre de la garganta y por lo tanto mejora el trastorno.
Al corregir la respiración durante el sueño mejorará la calidad del mismo, y el paciente tendrá los siguientes beneficios:
Eliminación del ronquido, las interrupciones respiratorias y los despertares con sensación de ahogo durante el sueño.
Mejorará la respiración.
Mejorará la calidad del sueño.
Mejoría del cansancio, la fatiga, el estado de ánimo, la memoria, la somnolencia, etc.
Mejora el control de las enfermedades cardiovasculares (presión arterial, niveles de azúcar, colesterol, etc.)
Disminuye el riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares (hipertensión arterial sistémica, diabetes mellitus, infartos al corazón, embolias cerebrales, arritmias cardiacas, etc.)
Recipiente en dode se coloca agua destilada para evitar la resequedad de nariz, boca y garganta.
Sirve para almacenar datos, como el tiempo de uso y si se eliminan las interrupciones respiratorias de manera correcta.
Almohadilla que impide el paso de impurezas del aire a al equipo.
Accesorio que está en contacto con la cara y se fija con un arnés a la cabeza para evitar fugas de aire.
Es una manguera de 2 metros de largo por donde pasa el aire.